SUPERA TUS ANTOJOS!

En el post pasado les platique la importancia de diferenciar hambre, ganas de comer y antojo; dependiendo de esto es la respuesta a cómo enfrentar la ansiedad que te provoca comer y comer y comer.

Hoy me enfocare a los antojos porque son terribles cuando no tienes control sobre ellos, hagan de cuenta que son como un Boggart de la película de Harry Potter (si soy fan que quieren jeje) mientras menos quieres pensarlo el antojo se hace mas y mas y mas grande; pero ¿adivina qué? Si dejas pasar el tiempo el grado de antojo pasa y luego hasta se te olvida. Esto lo descubrí en una sesión de terapia de exposición.

Yo creo que esa sesión de terapia ha sido de las más importantes que tome y en definitiva cambio mi vida y la forma de ver la comida; en especial los antojos. Confieso que Garfield se quedaba corto con la Lasagna, era mi comida preferida; me encantaba como no tienen una idea y desde que tuve esa sesión si acaso la probé una sola vez en el año y ya no me gusto! Ahora tengo otras comidas preferidas.

Llegue a mi sesión semanal de terapia y ya me esperaba la mesa puesta con una riquísima y calientita lasagna de uno de mis restaurantes favoritos; si la verdad pensé que al final me la comería! Jaja ilusa de mi! (seguro se la comió la terapeuta cuando me fui jeje). Apenas me dijo que no me la iba a comer comencé a sentir que se me bajaba el azúcar, se me subía la presión, me iba a convulsionar, así literal al borde del desmayo (miren que para dramas a veces me pinto sola jaja); me dio una hoja y me pidió que registrara el grado de antojo en un rango de 1 a 10 siendo 10 la calificación más alta, recuerdo que comencé con 7 y fue subiendo 8! . . . 9! Porque déjenme decirles que además de tener la Lasagna enfrente la muy mala se la pasaba hablando sobre lo riquísima que seguramente estaba la lasagna, lo rico que olia, que imaginara estar en mi restaurante preferido con mis amigas enfrascadas en pleno chisme disfrutando un vinito con esa riquísima lasaña; ósea fui torturada hasta un punto en el que si hubiera practicado en algún momento de mi vida futbol americano yo si la tacleaba y me aventaba por mi más grande debilidad, la lasaña!

No tengo idea cuantos minutos pasaron, pero a mí se me hicieron horas! Para mi sorpresa, después de llegar mi antojo al grado 9, comenzaron a disminuir mis ganas por comerme la lasaña, 8 . . . 7 . . . 6! Mientras más pasaba el tiempo se iba pasando el antojo! La lasaña ya estaba fría, ya no olía rico, comencé a ver toda esa grasa o aceite que tenía alrededor, la salsa se veía como cruda y ya me había aburrido de estar ahí frente a esa cosa que en algún momento fue mi platillo preferido, podría decir que además ya me había resignado a que no me la iba a comer pero aunque me hubiera dejado comérmela al final, se veía ya tan fea que ni ganas!

  

Así enfrente a mi más grande antojo y después de eso fue más fácil resistir cada que se me antojaba algo, por ejemplo cuando iba a un cumpleaños y había pastel pensaba: “Si me resistí a mi más grande antojo la lasaña por supuesto que puedo resistirme y no probar ese pastel que además quien sabe si este bueno (porque ya en serio no siempre los pasteles saben ricos o son de nuestro gusto). Para que desperdiciar mis calorías! Dicen por ahí que un minuto en tu boca y muuucho tiempo en tus caderas! Bueno algo así!

Te invito a que hagas el ejercicio! Puedes platicárselo a alguien que sea tu apoyo y que sepas que evitara a toda costa que termines comiéndote tu mas grande antojo. Tomate el tiempo de elegir que es lo que más se te antoja y no te puedes resistir, cómpralo en tu lugar preferido, arma toda la escena y califica tu grado de antojo; al final debes ser valiente y tirarlo a la basura; con esto te vas a dar cuenta que no pasa nada si no te comes algo, la vida sigue y no te dará un bajón de azúcar ni se subirá tu presión ni comenzaras a convulsionarte como yo crei en algún momento!

Que tengas un excelente fin de semana!

Solo como reflexion, este ejercicio sobre antojos aplica no solo para la comida! Piensa en que otras situaciones puedes superar tus antojos . . . a las compras por ejemplo! Tampoco pasa nada si no te compras esos hermosos zapatos cuando sabes que tienes 20 pares y solo 2 pies! =)